Jackson Cionek
6 Views

Principio Biocéntrico: el ser humano como parte del bioma, no su señor

Principio Biocéntrico: el ser humano como parte del bioma, no su señor

Cuando digo Principio Biocéntrico, no estoy proponiendo una idea romántica de “amar a la naturaleza”.

Estoy diciendo algo mucho más concreto:

cada decisión económica, jurídica y tecnológica
debe partir de la evidencia de que somos un animal más en un bioma,
no un gerente externo que mira el planeta desde arriba.

El biocentrismo, en ética ambiental, afirma que toda forma de vida tiene valor intrínseco,
no solo aquello que sirve a los humanos.

Cuando conecto esto con mi lenguaje, digo:

  • la Mente Damasiana (interocepción + propriocepción) es siempre cuerpo-en-bioma;

  • el Quorum Sensing Humano depende de agua, aire, suelos, bacterias, plantas, animales;

  • destruir el bioma es una forma de suicidio metabólico:
    el cuerpo social corta las condiciones de su propio cerebro.


El foco que quiero encender

De todo lo que puede implicar el biocentrismo, aquí elijo un solo foco:

ninguna política pública debería considerarse “desarrollo”
si empuja un bioma más allá de sus límites de regeneración.

Eso significa:

  • PIB sin bioma sano no es progreso, es liquidación de patrimonio;

  • una constitución que no ponga límites claros
    al uso de agua, suelo, biodiversidad y energía
    está escrita desde el antropocentrismo ciego;

  • el Principio Biocéntrico debe ser un criterio constitucional
    para validar o vetar modelos productivos.


Del antropocentrismo al biocentrismo constitucional

La ética biocéntrica nos llama a reconocer:

  • que los humanos somos una especie entre muchas,
    interdependiente con plantas, animales, microorganismos y ecosistemas;

  • que no tenemos un derecho automático a sacrificar otras formas de vida
    por cualquier objetivo económico de corto plazo;

  • que el valor de un bosque, un río o un humedal
    no se reduce a su precio de mercado.

Las constituciones de Ecuador y Bolivia, al incorporar el Buen Vivir
y los derechos de la naturaleza, dieron un paso en esta dirección:
la naturaleza dejó de ser solamente objeto de propiedad
y pasó a ser sujeto de derechos, en diálogo con cosmovisiones indígenas.

Hoy, incluso esa conquista está en disputa,
como muestra el debate actual sobre la posible reforma de la constitución ecuatoriana
y la amenaza de retrocesos en los derechos de la naturaleza
y de los pueblos originarios.

Aprendo de esa experiencia:

si el Principio Biocéntrico no queda fuertemente protegido en la Constitución,
el extractivismo siempre intentará capturarlo o borrarlo.


Biomas, biodiversidad y salud humana

El Principio Biocéntrico no es solo una postura moral.
Es también una lectura científica del vínculo entre biodiversidad, ecosistemas y salud.

La evidencia muestra que:

  • ecosistemas diversos sostienen mejor
    funciones como purificación de agua, control de plagas, polinización y regulación climática;

  • la degradación de ecosistemas aumenta el riesgo de enfermedades,
    inseguridad alimentaria y desastres climáticos.

Al mismo tiempo, la relación entre naturaleza y salud mental es clara:

  • la exposición a espacios verdes se asocia a
    menor estrés, mejor atención, mejor estado de ánimo
    y menor riesgo de trastornos psiquiátricos;

  • conexiones fuertes con la naturaleza
    correlacionan con menos ansiedad y estrés,
    especialmente cuando las personas pueden usar parques y áreas verdes con regularidad.

Resumiendo en mi lenguaje:

un bioma sano no es un lujo ecológico,
es un órgano vital del sistema nervioso colectivo.

Destruir biodiversidad es atacar:

  • la regulación de nuestro clima local;

  • la calidad de agua y aire que respiran nuestros cuerpos;

  • las condiciones que sostienen la salud mental en Zona 1 y Zona 2.


Interocepción, pertenencia y bioma

Investigaciones recientes muestran que:

  • la conciencia interoceptiva (sentir señales internas del cuerpo)
    predice conexión con la naturaleza y bienestar;

  • personas con mayor interocepción
    tienden a comportamientos más proambientales
    y a un sentido más fuerte de pertenencia al mundo vivo.

Para mí, esto confirma la intuición:

cuando siento mi cuerpo por dentro (Mente Damasiana),
también siento que no estoy separado del bioma.

Un Estado que promueve el Principio Biocéntrico
no es solo más “verde”;
es un Estado que:

  • protege la base fisiológica de la empatía con la vida;

  • crea condiciones para que la población
    salga de la Zona 3 de supervivencia y consumo compulsivo
    y pueda habitar más tiempo la Zona 2 de fruición y metacognición,
    donde la creatividad y el cuidado son posibles.


Del discurso biocéntrico a criterios concretos

¿Cómo se traduce el Principio Biocéntrico en política pública?

Algunas líneas que propongo:

  1. Límites metabólicos por bioma

    • definir, con base científica e indígena,
      límites de extracción de agua, suelo, biomasa y energía
      para cada bioma del país;

    • prohibir actividades que empujen al bioma
      más allá de esos límites (deforestación masiva, mega-minería en cabeceras de cuenca, etc.).

  2. Evaluación biocéntrica de proyectos

    • ningún proyecto puede aprobarse
      si destruye hábitats críticos, especies clave o funciones ecológicas esenciales;

    • incorporar indicadores de salud mental y bienestar
      ligados al acceso a naturaleza en las evaluaciones de impacto.

  3. Derechos de la naturaleza y de los biomas

    • reconocer a biomas específicos (ríos, bosques, humedales, cordilleras)
      como sujetos de derechos, vinculados a comunidades que los habitan;

  4. Presupuestos con prioridad biocéntrica

    • el gasto público debe priorizar
      restauración ecológica, protección de biodiversidad
      y acceso equitativo a naturaleza en ciudades;

  5. Educación biocéntrica

    • incluir en la educación pública
      contenidos sobre biodiversidad, interdependencia,
      salud ecosistémica y salud mental,
      conectando ciencia, saberes originarios y experiencia corporal.


Borrador de artículo constitucional (Chile, en español)

Artículo X – Principio Biocéntrico y centralidad de los biomas

  1. El Estado reconoce el Principio Biocéntrico, según el cual todas las formas de vida poseen valor intrínseco y los seres humanos forman parte de los biomas y ecosistemas de los que dependen, sin ostentar supremacía absoluta sobre ellos.

  2. La interpretación y aplicación de esta Constitución, de las leyes y de las políticas públicas deberá respetar los límites metabólicos de los biomas, entendidos como los umbrales ecológicos necesarios para mantener la biodiversidad, las funciones ecosistémicas y las condiciones de salud integral de las comunidades humanas y no humanas.

  3. Se establecerán, mediante ley y con participación de pueblos originarios, comunidades locales y la comunidad científica, criterios específicos para la protección y restauración de los biomas, incluyendo límites de extracción de agua, suelo, biomasa y energía, así como la prohibición de actividades que los sobrepasen de manera irreversible.

  4. En la evaluación de proyectos de inversión, planes de desarrollo y normas sectoriales, será obligatorio considerar indicadores de biodiversidad, funciones ecosistémicas y bienestar humano, incluyendo la salud mental y el acceso equitativo a espacios de naturaleza, con el fin de asegurar que el desarrollo económico no implique destrucción de los biomas.

  5. El Estado promoverá la educación biocéntrica, incorporando en todos los niveles del sistema educativo el conocimiento sobre la interdependencia entre seres humanos y biomas, la importancia de la biodiversidad para la salud y el Bien Vivir Metabólico, y el respeto a los saberes de los pueblos originarios en relación con la tierra y los otros seres vivos.


Referencias sugeridas (hasta 8, con comentarios – ≥3 neuro/psico/saúde)

  1. Biocentrism / Biocentrism (ethics). Encyclopaedia Britannica; Wikipedia (consultas recientes).
    Definen el biocentrismo como la perspectiva ética que atribuye valor intrínseco a todos los seres vivos y cuestiona el antropocentrismo como centro exclusivo de la moral y la política.

  2. Rapid Transition Alliance (2018). “The Rights of Nature in Bolivia and Ecuador: Buen Vivir in practice.”
    Describe cómo Ecuador y Bolivia incorporaron el Buen Vivir y los derechos de la naturaleza en sus constituciones, ofreciendo ejemplos concretos de un giro biocéntrico en el derecho.

  3. Robinson, J. M. et al. (2024). “Biodiversity and human health: A scoping review.” Environmental Research.
    Revisión amplia que mapea las conexiones entre biodiversidad y salud humana, mostrando cómo ecosistemas más diversos pueden sostener mejor el bienestar.

  4. Ulrich, W. et al. (2023). “From biodiversity to health: quantifying the impact of diverse ecosystems on ecosystem services.” People and Nature.
    Analiza cómo la diversidad de especies mejora el funcionamiento ecosistémico y los servicios que benefician directamente a las sociedades humanas.

  5. Bratman, G. N. et al. (2019). “Nature and mental health: An ecosystem service perspective.” Science Advances.
    Revisión de evidencia que vincula experiencias en la naturaleza con beneficios para la salud mental, proponiendo un marco de servicios ecosistémicos psicológicos.

  6. Lovell, R. et al. (2014). “A systematic review of the health and well-being benefits of biodiverse environments.” Environmental Research.
    Revisión sistemática que examina si entornos biodiversos son promotores de salud, aportando base empírica para políticas biocéntricas.

  7. Branham, L. et al. (2024). “Interoceptive awareness, nature connection and wellbeing.” Frontiers in Psychology.
    Muestra que la conciencia interoceptiva predice conexión con la naturaleza y bienestar, conectando directamente cuerpo, bioma y salud mental.

  8. **Chang, C. et al. (2024). “A lower connection to nature is related to lower mental health.” Scientific Reports.; Harris, N. M. et al. (2025). “Nature connectedness and behaviours for learning and wellbeing.” Child and Adolescent Mental Health.
    Ambos trabajos refuerzan que una conexión débil con la naturaleza se asocia a mayor estrés y peores indicadores de salud mental, especialmente en jóvenes, justificando constitucionalmente la protección de biomas y acceso a naturaleza.







#eegmicrostates #neurogliainteractions #eegmicrostates #eegnirsapplications #physiologyandbehavior #neurophilosophy #translationalneuroscience #bienestarwellnessbemestar #neuropolitics #sentienceconsciousness #metacognitionmindsetpremeditation #culturalneuroscience #agingmaturityinnocence #affectivecomputing #languageprocessing #humanking #fruición #wellbeing #neurophilosophy #neurorights #neuropolitics #neuroeconomics #neuromarketing #translationalneuroscience #religare #physiologyandbehavior #skill-implicit-learning #semiotics #encodingofwords #metacognitionmindsetpremeditation #affectivecomputing #meaning #semioticsofaction #mineraçãodedados #soberanianational #mercenáriosdamonetização
Author image

Jackson Cionek

New perspectives in translational control: from neurodegenerative diseases to glioblastoma | Brain States